Plaguicida es el nombre genérico asignado a cualquier sustancia o mezcla de substancias que se use para controlar las plagas que atacan los cultivos o a los insectos que son vectores de enfermedades. Los plaguicidas se utilizan desde épocas remotas, cuando los primeros pobladores descubrieron que al quemar algunas hierbas se ahuyentaban ciertos mosquitos. Los plaguicidas no son esencialmente dañinos, pero eventualmente pueden ser tóxicos para las personas u animales.
Actualmente, la mayoría de estas sustancias son elaboradas por el hombre, por eso reciben el nombre de plaguicidas sintéticos. El primer plaguicida sintetizado fue el diclorodifeniltricloroetano (DDT), cuyas propiedades insecticidas fueron descubiertas por Müller en1939.
Las plagas susceptibles a los plaguicidas incluyen insectos, hierbas, pájaros, mamíferos, moluscos, peces, nematodos o microbios que “pelean” con los humanos para obtener alimento, dañan propiedades, propagan patologías o causan molestias.
USOS DE los Plaguicidas
Como se dijo, los plaguicidas o pesticidas, son sustancias químicas utilizadas para prevenir, destruir, atraer, repeler o luchar contra plagas, incluidas especies indeseadas de plantas o animales, durante la producción, almacenamiento, transporte, distribución y/o elaboración de alimentos o insumos agrícolas. También pueden suministrarse a los animales para eliminar ectoparásitos.
El uso más frecuente de los plaguicidas es la erradicación de ratas y mosquitos que generan afecciones como la fiebre amarilla y la malaria.
Su aplicación conlleva riesgos, pero si se hace adecuadamente, esos riesgos se reducen a un nivel considerado tolerable por las agencias que regulan su uso en algunos países, entre ellas la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) y la Agencia Reguladora del Manejo de Pestes (PMRA) de Canadá.
CLASIFICACIÓN DE LOS PLAGUICIDAS
Hay muchos plaguicidas, y pueden ser clasificados de distintas maneras:
- De acuerdo a su toxicidad: Pueden ser plaguicidas extremadamente peligrosos, altamente peligrosos, moderadamente peligrosos y ligeramente peligrosos.
- Según su vida media: Pueden ser permanentes, persistentes, moderadamente persistentes y no persistentes.
- Dada su estructura química: Se clasifican en diversas familias, como los órganos clorados, los órganos fosforados, los carbamatos y los piretroides.
- De acuerdo al organismo que controlan: Se dividen en insecticidas, acaricidas, herbicidas, fungicidas, rodenticidas, nematicidas, molusquicidas, bactericidas y fumigantes.
EFECTOS AMBIENTALES
El desarrollo de los plaguicidas ha sido fundamental para el crecimiento de la agricultura. Gracias a su efectividad y bajo costo, han permitido, desde la década de los 80, la protección de los cultivos de casi cualquier amenaza de tipo biótica. No obstante, se ha demostrado que el uso indiscriminado de plaguicidas afecta el medioambiente e incluso altera a las plagas, haciéndolas más resistentes.
Más del 98% de los insecticidas fumigados y del 95% de los herbicidas, llegan a destinos diferentes a los deseados, incluyendo especies vegetales y animales, aire, agua, sedimentos de ríos, mares y alimentos.
El desvío de plaguicidas sucede cuando las partículas suspendidas en el aire son desplazadas por el viento a otras áreas, promoviendo su contaminación. De allí, que los plaguicidas pueden alterar el agua y la atmosfera.
El uso descontrolado de plaguicidas químicos agudiza el desequilibrio ecológico de un agroecosistema y provoca la resistencia de insectos, plantas y hongos. No obstante, los insectos despliegan mecanismos bioquímicos que permiten que las dosis utilizadas no sean mortales y sean capaces de heredarlas a generaciones futuras.
plaguicidas naturales
En algunos países se prohíben los plaguicidas, pues no son biodegradables, pasan del pasto a los animales y luego al ser humano. En su lugar se están usando los biopesticidas o los plaguicidas naturales, entre los que se tienen:
- NIM (Azadirachta indica): Árbol originario de la India, utilizado en todo el mundo como fungicida, plaguicida, nematicida y bactericida. Posee un “ingrediente” que es análogo a una hormona que tienen los insectos, que logra alejarlos.
- CHILE (Capsicum frutescens): Plaguicida natural que previene gusanos, hormigas, picudo del arroz y mariposas del repollo.
- TABACO (Nicotianata bacum): La nicotina del tabaco, funciona como insecticida. Controla insectos como moscas, gusanos y pulgas. Debe aplicarse por la mañana ya que la solución es volátil. Además, puede resultar tóxico para las personas.
- AJO (Allium savitum): La preparación a base de ajo previene casi todo tipo de plagas.
- RICINO (Ricinus communis): Se usan los tallos, semillas y hojas. Esta solución no sólo repele insectos, sino que también actúa como fungicida y nematicida.
Más plaguicidas
Otros arbustos y plantas manejados como plaguicidas orgánicos o naturales son: Buganvilla, anona, guanábana, espinaca, piretro, menta, dalia y ginkgo. De igual modo se tienen la lavanda (evita las hormigas), romero (aleja a los insectos), salvia (espanta moscas), ruda (agrede pulgones), ajenjo (repele gorgojos, ácaros y orugas), manzanilla (ataca pulgones), albahaca (su perfume espanta insectos como chinches y pulgones), orégano (arremete contralas hormigas) y madero negro, pero existen muchísimos más.
Los plaguicidas naturales tienen una gran ventaja a nivel económico, porque se elaboran con productos naturales que, al no requerir industrialización, minimizan considerablemente su costo, siendo esto una gran bondad, destacada por muchos especialistas que promueven su uso.
Existen productos que sin ser plantas son naturales, y se manejan como insecticidas. Destacan la cal, aceite mineral,leche de vaca y orina humana o de animales.