Al hablar de glifosato nos referimos a uno de los herbicidas de más amplio espectro. Su desarrollo y uso están orientados a la eliminación de hierbas y arbustos, especialmente aquellos que son perennes.
El glifosato es el herbicida más empleado alrededor del mundo, el más popular y por lo tanto el más controversial y polémico de todos. Durante muchos años estuvo vinculado a la empresa Monsanto, ya que es el principio activo de su herbicida Roundup, cuya patente expiró en el año 2000.
Durante un buen tiempo su utilización estuvo ligada a los organismos modificados genéticamente, es por ello que ha sobrepasado el aspecto científico y se ha llevado a otros aspectos sociales, económicos y políticos.
El glifosato fue sintetizado por primera vez en los años 50, pero fue en 1970 cuando John E. Franz, un químico de la empresa Monsanto, descubrió sus efectos herbicidas. Posteriormente, comenzó a comercializarse en 1974, con el nombre de Roundup. Su éxito inició en 1994, cuando Monsanto inició la venta de plantas que, debido a modificaciones genéticas, eran inmunes a los efectos de glisofato. De esta forma, el producto era usado en grandes cantidades sin afectar los cultivos.
¿Cómo funciona el glifosato?
Este químico actúa inhibiendo la ruta de la biosíntesis de aminoácidos aromáticos. Debido a que esta ruta solo está presente en las plantas, no tiene ningún efecto tóxico en animales. Una de las principales características del glifosato es que su vida es muy corta, apenas 22 días.
Este breve periodo dificulta que sus efectos acumulativos sean significativos a mediano y largo plazo. Sin embargo, se ha demostrado que su uso de manera intensiva si tiene efectos en el entorno en el que son aplicados, aunque no son propiamente tóxicos.
Peligros del glifosato
De acuerdo a diversos estudios, el glifosato puede perjudicar el ambiente. De hecho, países como Argentina, Colombia y Brasil sufren también consecuencias ecológicas y sanitarias que se derivan de su uso.
Las consecuencias del glifosato pueden ser la contaminación del agua, lo que podría afectar la supervivencia de los artrópodos. Además, el hecho de que no se emplee exclusivamente para el control de las malas hierbas, sino también para cavar con diferentes cultivos, ya sean legales e ilegales, ha llevado a que diferentes organismos humanitarios y ecologistas denuncien su aplicación.
Uno de los problemas sociales causados por la utilización del glifosato es el desplazamiento de poblaciones enteras, que huyen de sus efectos dañinos.
estudios sobre los efectos del Glifosato
El glifosato se encuentra en la lista de posibles cancerígenos expuesta por la Organización Mundial de la Salud. La OMS explica que existe evidencia científica para pensar que la exposición con él pudiera ocasionar cáncer, pero algunos expertos calculan que la relación del glifosato con esta enfermedad no se ha confirmado, especialmente por tener serios problemas metodológicos.
Igualmente, diversos estudios invitro demostraron que el glifosato afecta directamente la producción de progesterona en células de diferentes mamíferos. Si bien es cierto que el efecto es mucho menor que otros pesticidas, aún se debate si este químico debe ser incluido en la lista de disruptores endocrinos.
Epidemiología
Existe una investigación de una universidad italiana que concluye que el glifosato es directamente perjudicial. Este estudio, basado en la observación de la aparición de “micronúcleos” derivados de estrés o daño en el material genético, arrojó que este químico puede causar muerte celular y alteraciones hormonales.
Hay también otros análisis que señalan actividad pro tumoral del glifosato y sus adyuvantes, como el adyuvante no iónico X-77, que aparentemente provoca la proliferación de células causantes de tumores en las mamas.
Los adyuvantes son aquellos otros líquidos en los que es disuelto el glifosato para que pueda penetrar en la hoja de las plantas e incrementar su dispersión, disminuyendo el tamaño de la gota y permitiendo que se expanda por todo el cultivo.
Este tipo de investigaciones señalan que es necesario levantar una moratoria urgente al uso de este producto, ya que sus consecuencias no se limitan al medio ambiente sino también a quienes consumen plantas genéticamente modificadas alrededor del mundo.
Es por ello que diversas organizaciones ambientales han levantado su voz en diversos países para prohibir la utilización de pesticidas con glifosato y plantas transgénicas, para mantener la salud de la población y el equilibrio de la naturaleza en general.
En la actualidad, varias naciones latinas y europeas están estudiando protocolos destinados a la prohibición del glifosato y los pesticidas que lo contengan.
Deja una respuesta