Una de las plantas más enigmáticas que existen es la Cycas revoluta, un tipo de palmera originaria de Japón. Se le conoce popularmente como cica, falsa palmera, palma de iglesia y palma sagú. Se le puede reconocer por su tronco grueso y cilíndrico, con largas espigas que crecen en los extremos, con apariencia de abanicos. En algunas tribus indígenas las cortan para fabricar esos artículos.
Características de la Cycas revoluta
Las hojas se caracterizan por un color verde intenso, y pueden medir entre 50 y 150 centímetros. El diámetro del tronco puede ser de uno 20 centímetros, aunque los hay más anchos. Por lo general es peludo y bajo, no excediendo los siete metros. Aunque puede ramificarse en distintas ocasiones, su desarrollo es bastante lento. Se estima que puede demorar entre 50 y 100 años en alcanzar su mayor altitud.
Cultivo de la Cycas revoluta
La Cycas revoluta necesita ser ubicada en un espacio donde no le dé la luz directa del sol. Sólo así se evitará que sus hojas se palidezcan y se tornen amarillas. Por lo general no se desarrolla en intensos fríos, sino en zonas frescas.
Se puede cultivar mediante semillas, que se consiguen en tiendas de jardinerías o viveros). Son muy duras, por lo que deben someterse al proceso de estratificación, que consiste en ablandarlas mediante remojo.
Sin embargo, si quieres tener una Cyca revoluta en tu hogar, te recomendamos plantar hijos o retoños que hayan derivado de ejemplares adultos. Sólo deben cortarse o sacarse con extremo cuidado, y colocarlos en macetas con tierra y arena, para beneficiar el drenaje. Es imprescindible que el recipiente tenga desagües, para que no haya acumulación de líquido, pues ello podría dañar las raíces. Después de esto tarda entre seis meses y un año (o más) en crecer. Para que tome unos dos metros, deben transcurrir al menos diez años.
Al empezar a echar hojas nuevas se puede extraer de la maceta y ubicarla en el suelo definitivo, a una profundidad considerable. Esto no es del todo necesario, muchas Cycas pueden permanecer toda su vida en vasijas.
Esta especie no requiere tanta agua. Se sugiere regar cuatro veces a la semana si está en el exterior, y dos si está en áreas internas.
Contra las plagas
El mal de las Cycas revoluta son las plagas, especialmente las conocidas como cochinillas. Estos insectos de color blanquecino suelen aparecer entre las hojas espigadas y finas. Para eliminarlos, lo ideal es buscar insecticidas eficaces en tiendas especializadas. Eso sí, deben aplicarse en horas de la mañana, cuando el sol no sea demasiado intenso, porque la «mezcla» de calor y químicos podría generar quemaduras en los tallos. También se pueden cortar las ramas que estén infectadas, para que no se expandan.
toxicidad de la Cycas revoluta
Un dato a considerar sobre la Cycas revoluta, es que sus hojas poseen altos niveles de toxicidad tanto para el hombre, como para los animales.
¿Cómo puede ocurrir un envenenamiento? Al consumirse parte de la planta. Los animales que lo hacen presentan vómitos, diarrea, sangrado y otras complicaciones que si no se atienden oportunamente, producen la muerte.
La razón por la que la Cycas revoluta es tan dañina, es porque las semillas poseen cicasina, una toxina que provoca la irritación intestinal.
Origen de la planta
El nombre de Cycas Revoluta se deriva de la palabra griega “kykas”, que se traduce como palmera. Los relatos históricos refieren que anteriormente se le relacionaba mucho con la realeza, por sus finas hojas. Mientras, los indígenas, creían que confeccionar los abanicos con sus ramas ayudaba a sacar a espíritus malos de la tribu.
Las palmeras son las plantas más versátiles que hay, debido a sus más de 15 especies que se adaptan a diversos tipos de clima y suelo. La Cycas Revoluta no es nueva, pues de acuerdo a los especialistas su origen data de hace unos 200 millones de años. Desde entonces se han aprovechado sus bondades ornamentales.
Si se siembran varias Cycas a poca distancia una de otra, crecen formando una suerte de muro que embellece el jardín. Los machos de esta especie se diferencian de las hembras porque de algunas ramas brota una espiga gruesa y gigante, parecida a una corona. Esa corona posee polen, por lo que es muy común notar la presencia de abejas y otros insectos nutriéndose y sobrevolando las planta.
Plantaciones necesarias
En la actualidad se habla de un riesgo de extinción de la Cycas, debido a su poca siembra y cultivo, pese a que los cuidados en su plantación no son muchos ni rigurosos.
A esta variedad se les conoce como “fósiles vivientes”, por su longevidad en el tiempo. Así que si deseas tener una planta que dure muchos años, esta es perfecta para ti.
Su permanencia en el tiempo (incluso 200 años), convierte al arbusto en centro de estudios científicos. Muchas instituciones académicas dedican esfuerzos para determinar los factores que favorecen su perdurabilidad, y su capacidad de adaptación a los diferentes entornos.
Pese a contener una toxina venenosa, hay comunidades en Papúa y Guinea, donde la Cycas es utilizada como ingrediente para la elaboración de productos como harina.
No obstante, su mayor aplicación radica en el ámbito decorativo. Las hojas son útiles en la fabricación de adornos y pinturas. Si te agrada su aspecto, puedes solicitar en las tiendas esta u otras variantes parecidas: Cycas inermis, Epicycas miquelii, Cycadaceae, Cycadopsida y Cycadophyta.
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